JUDAIZAR EL CRISTIANISMO HASTA QUE DESAPAREZCA LA RELIGIÓN DE TO EL GRAN PROPOSITO DE LA CIA
Dale al papá del este!" La CIA lucha por la influencia sobre los cristianos
MOSCÚ, 31 de enero - RIA News. En el entorno ortodoxo, estalló una lucha por las mentes. El Patriarca de Bartolomé de Constantinopla está tratando de atraer a los jefes de las iglesias locales a su lado para que reconozcan la cismática "Iglesia Ortodoxa de Ucrania". Y el propio "Primado de Estambul" afirma ser el líder de la ortodoxia mundial y con el apoyo de los servicios especiales. Sobre cómo la CIA lo convirtió en el "Papa del Este", en el material de RIA Novosti.
Tu hombre en Estambul
Vale la pena, literalmente, a un par de kilómetros de Ginebra, la segunda ciudad más grande de Suiza, ya que las concurridas aceras dan paso a estrechos caminos desiertos a lo largo de la autopista, y en lugar de modernos edificios de cristal de gran altura, aparecen pequeñas casas con techo inclinado. El pueblo de Chambesi es considerado uno de los lugares más elitistas de la zona. Aquí viven principalmente diplomáticos, no solo seculares, sino también eclesiásticos.
Su presencia se evidencia solo por un plato en francés en la entrada de la aldea: "Iglesia Ortodoxa Griega de San Pablo". Pero así no se puede encontrar el templo: está escondido entre las casas y los grandes árboles. Red con la advertencia "Propiedad privada, está bajo protección" y una cámara de vigilancia. Y detrás de la cerca: un edificio de hormigón de forma extraña. No hay ventanas en él, solo algunas aberturas como lagunas. Solo dos puertas, y están cerradas. Y la cruz corona la estructura, más como una antena. Parece que es un búnker, no una iglesia.
En realidad, fue construido solo en caso de evacuación. No se limita solo al templo aquí: es todo un complejo, que oficialmente se llama Centro Ortodoxo del Patriarcado de Constantinopla en Chambesy. Fue erigido en 1966 en caso de un posible vuelo desde Estambul de uno de los predecesores de Bartolomé en el trono de Constantinopla: el patriarca Atenagoras.
El patriarca temía por una razón. El hecho es que el centro administrativo del patriarcado ecuménico (como la Iglesia de Constantinopla todavía se llama a sí mismo) en Turquía, al contrario del ruidoso nombre, son algunos edificios modestos que se apiñan en el distrito Fanar de Estambul. Y no es ningún secreto para nadie que la estabilidad del trono patriarcal depende en gran medida de las autoridades turcas. Así fue, por ejemplo, con el predecesor de Atenágoras, el Patriarca Maxim V, contra quien se desarrolló una verdadera batalla de información. Y todo porque en 1948, cuando la Guerra Fría estaba ganando impulso, envió una delegación a la Conferencia Pan-Ortodoxa en Moscú. En Turquía, que luego buscó a la OTAN, fue acusado de espionaje por esto.
Como resultado, el patriarca que era objetable a las autoridades fue expulsado, supuestamente debido a problemas de salud. Y no fue sin espías: todo el proceso fue supervisado por la CIA.
"Las medidas en curso para reemplazar al anciano Maxim como patriarca ecuménico de la Iglesia ortodoxa griega finalmente condujeron al éxito. Durante más de un año, los metropolitanos que eran miembros del Santo Sínodo trataron de sacarlo del patriarcado, representando a los griegos ortodoxos en todo el mundo ... Ahora el patriarca está esperando una decisión sobre el lugar de su estadía posterior". - Dijo el informe secreto de la CIA del 11 de agosto de 1948 (el documento fue desclasificado hace solo unos años).
Memorándum de la CIA (agosto de 1948) de materiales desclasificados de la CIA
Fue Atenágoras la que ocupó un lugar vacante por una buena razón. Durante casi 20 años, dirigió el arzobispado estadounidense de la Iglesia de Constantinopla, donde obtuvo el apoyo de los miembros más influyentes de la diáspora griega. Y uno de ellos, el director de la compañía cinematográfica 20th Century Fox Spyros Skuras, presentó al futuro patriarca al presidente Harry Truman. El magnate del cine se hizo suyo en la Casa Blanca durante los años de guerra gracias a la ayuda del movimiento partidista en Grecia ocupado por los nazis.
"Desde 1946, los estadounidenses, con la ayuda del gobierno griego, se han estado preparando de varias maneras para poner a su hombre hostil a la Unión Soviética en el Trono Patriarcal Ecuménico en Constantinopla, mientras Maxim habló a su debido tiempo para acercarse a la Iglesia Rusa. En su lugar, el arzobispo está programado Atenagoras de Nueva York, griego por nacionalidad, ciudadano estadounidense ", describió la situación, el presidente del Consejo de la Iglesia Ortodoxa Rusa, Georgy Karpov, en un memorando al Ministro del Consejo en la URSS.
... y en el Vaticano
En enero de 1949, el patriarca Atenagoras en su primer sermón sobre la nueva dignidad agradeció a sus curadores. Llamó a los creyentes a unirse para "luchar contra la amenaza comunista". Además, no se trataba solo de los ortodoxos, sino también de representantes de otras religiones cristianas.
Entonces el mundo cristiano aún no se dio cuenta de que sin darse cuenta se convirtió en un participante en la batalla ideológica de las dos superpotencias. Solo diez años después, las conversaciones sobre política en los templos comenzaron a sonar casi con más frecuencia que las oraciones, cuando el Papa Juan XXIII se convirtió en el jefe de los católicos, la denominación más grande.
Los años de su reinado coincidieron con la exacerbación de la Guerra Fría, en gran parte debido a Cuba. El gobierno de Fidel Castro, que llegó al poder en la isla, fue condenado ferozmente por los obispos católicos, llamando al líder de la revolución cubana anticristo. Como resultado, los cardenales más influyentes pidieron al Papa que lo excomulgara. Pero se negó a hacer esto, sorprendiendo no solo al rebaño, sino también a los líderes de los estados occidentales. Además, el Papa, en contra de las expectativas, pidió superpotencias por la paz. Durante la crisis caribeña de 1962, cuando el planeta estaba al borde de una guerra nuclear, Juan XXIII llamó varias veces al presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy, instándolo a no comenzar una guerra con los soviéticos. Al enterarse de esto, la prensa estadounidense lo acusó de simpatizar con los comunistas, calificándolo de "papá rojo".
En mayo de 1963, declaró públicamente que quería establecer relaciones diplomáticas con la URSS. El 3 de junio, el papa murió inesperadamente por todos. Pero el cónclave no pudo elegir un nuevo "virrey de Cristo" ...
Como resultado, fue solo después de la quinta votación que los cardenales ganaron por un ligero margen sobre Monseñor Giovani Montini, quien tomó el nombre de Pablo VI. Era una persona bastante conocida, y no solo en Italia.
Papa Pablo VI
Según el historiador estadounidense William Bloom, que trabajó en el Departamento de Estado de los Estados Unidos en los años 60, el futuro pontífice colaboró activamente con las agencias de inteligencia occidentales.
"Fue otro beneficiario de los generosos obsequios de la CIA. <...> El buen cardenal patrocinó a los huérfanos en Italia en las décadas de 1950 y 1960, y como dice el subdirector de la CIA, Victor Marchetti," la idea era que si tales instituciones se mantenían adecuadamente De esta manera, los adolescentes no caerán en manos de los comunistas ", escribe Bloom en su libro.
Es decir, en lugar del "pro-soviético" Juan XXIII, los servicios secretos estadounidenses lograron la elección de su hombre. Y todo su pontificado, Pablo VI, se opuso abiertamente al comunismo.
Esta, muy probablemente, fue una de las razones por las cuales la idea del patriarca Atenagoras de "unirse para luchar contra la amenaza comunista" encontró rápidamente una respuesta en el Vaticano. En enero de 1964, los jefes de la Iglesia Ortodoxa de Constantinopla y la Iglesia Católica Romana se reunieron por primera vez en 500 años. Pero dos años antes de las negociaciones, Phanar canceló la visita de su delegación a Roma en el Concilio Vaticano II convocado por el "papa rojo" Juan XXIII.
¿"Papá nuevo" o "primero entre iguales"?
Fue entonces cuando el Patriarca de Constantinopla se convirtió en un político de nivel internacional. Y entre los fieles, incluso entonces, se temía la aparición del "Papa del Este", que tomaría y se atribuiría descaradamente a un rebaño ortodoxo trescientos millones.
¿Por qué temer? El hecho es que, de acuerdo con la doctrina ortodoxa, la Iglesia está controlada místicamente por Dios mismo, y ninguna de las personas puede reclamar el estado de lo más importante en ella. Esta es una de las principales discrepancias entre la ortodoxia y el catolicismo, donde el papa es reconocido oficialmente como el "virrey de Cristo en la tierra" e "infalible".
Fue este problema el que se convirtió hace dos años en un obstáculo para las iglesias locales cuando comenzaron los eventos eclesiásticos en Ucrania. El ex presidente Petro Poroshenko, al decidir crear su propia iglesia para ganar las elecciones, le pidió al Patriarca de Bartolomé de Constantinopla que legalizara la cismática ucraniana y otorgara autocefalia a la nueva estructura. Respondió a las súplicas, motivando su decisión diciendo que era "el primero entre los primates ortodoxos", lo que significa que podría interferir en disputas y cismas dentro de cualquier iglesia local, incluida la Iglesia rusa.
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, y el patriarca Bartolomé de Constantinopla en una reunión en la residencia del patriarca en Estambul. 3 de noviembre de 2018
El Patriarcado de Moscú insiste en que, de acuerdo con los cánones ortodoxos, el Primado de Constantinopla es solo "el primero entre iguales" y, por lo tanto, no tiene derecho a tomar decisiones en territorio canónico extranjero. En consecuencia, intervino en el problema de Ucrania por una razón.
"Las acciones del patriarca Bartholomew ya cortaron en partes el cuerpo de la Iglesia ortodoxa. Además, lo hace conscientemente. Se advirtió al patriarca Bartholomew que habría tales consecuencias, pero continúa su línea, cumpliendo el orden político que le llegó de los Estados Unidos de América". de este país no oculta el hecho de que son los principales clientes. El pedido se pagó en dinero, lo que también es bastante conocido ", dijo el jefe del departamento de servicios religiosos externos en una entrevista con el portal de habla francesa Orthodoxie.com idus de la Metropolitana Hilarión de Volokolamsk Patriarcado de Moscú.
Según él, el propósito de esta orden es "la destrucción de la unidad de la Iglesia Ortodoxa", y "en primer lugar, el Patriarca Bartolomé quiere destruir la Iglesia Ortodoxa Rusa y debilitarla tanto como sea posible". Aparentemente, la campaña ideológica lanzada por sus predecesores con el apoyo de servicios especiales no terminó con la Guerra Fría.
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