Archivo del blog

miércoles, 26 de febrero de 2020

NOVELAS DE ESPIONAJE

"Estaba de plantón a la puerta de la embajada un sargento mayor. Tenía cara de comadreja" (John Le Carré" una ciudad en Alemania") el espionaje británico es un circo, suena una música melancólica en una calle solitaria, se escuchan pasos. He aquí la receta para componer el pisto de un "thriller" con sus tres elementos: melancolía, circunspección y cinismo.
Le Carré elige el tono elegíaco le iba bien a la guerra fría. Hoy el mundo de Trump se ha vuelto chillón. El estilo del Mossad israelí y de la CIA se ha vuelto macarra. No existe una polifonía de fondo.
 Un busto parlante el rostro de la sibila larga noticias como el que canta una letanía y todas las emisoras todas las televisiones y radios se unen al coro de estos bustos parlantes gachís bien peinadas de pechos protuberantes y mucho maquillaje y todas diciendo lo mismo.
 En su agnoresis carecen del tempo y la cadencia. Ya no hay guerra fría esta es la era de las amenazas y los finiquitos. La era Trump una mala bestia son los tiempos de la peste y la bestia un ninenty eighty four refundido en 1348 el flagelo de la muerte negra.
Una novela de espías ha de gozar de un soporte homérico y ya no hay Orfeos negros. Los héroes son ahora rufianes y asesinos rubicundos como Judas que se desposaron en Maniatan con chicas de alterne.
 Ya no bastan los cadáveres en la alacena. El sargento británico con cara de comadreja vigila desde su tronera. Está al frente de la garita global. Pero ya no hay rojos.
Los archivos del KGB fueron quemados o vendidos a Occidente.
Un tipo tan espeluznante y con aires de macarra está al frente de la Casa de la cuesta. Se nos están muriendo las perdices.
El padre Huidobro fue destronado de su monolito. Este bolchevique es la tapadera o cover up con que el Mossad quiere volar al estado español.
Escucho y me divierte esta tarde apacible de febrero hoy Miércoles de Ceniza oír el aleteo de las becadas que regresan por el Estrecho, de vuelta a Europa pero no son las becadas inocentes circunvalándonos en ala delta. 
Son los ánsares del Capitolio que han comenzado a graznar desaforados anunciando la destrucción de Roma

No hay comentarios:

Publicar un comentario